Las fotos de Coaña son la de un concejo costero occidental que limita al este con la desembocadura del río Navia que se para su territorio de los concejos de Navia y Villayón. Territorio de una amplia rasa costera que comparte con El Franco y toma sus cotas más altas en la sierra de Penouta limitando con el concejo de Boal por el sur.  

Seis parroquias y una población emigrante

El concejo se divide en seis parroquias, tres de marina y otras tres de montaña. La primeras son Santiago de Folgueras, Sa Martín de Mohías y Santa María de Cartavio, mientras que la altas comprenden las parroquias de San Juan de Trelles, Villacondide  y Santa María de Coaña. Su población oscila en torno a los 4000 habitante con pocas oscilaciones en el tiempo. Como tantos concejos asturianos, sufrieron los flujos migratorios de principios del siglo XX con destino a América y los posteriores de las décadas de los 60 y 70 con los movimientos a países del centro de Europa.

Actividad enconómica

Es un territorio eminentemente agrario y ganadero. Pese a su carácter costero, la pesca no supone una de las fuentes económicas importantes de Coaña. Su puerto de Ortigueíra, encañonado en un entrante estrecho del Cantábrico, es espectacular. Bien es cierto que la poca capacidad de atraque de su muelle no facilita un actividad pesquera importante, pero buena parte de la población de Ortiguera tubo su sustento en la pesca y aún mantienen ese carácter marinero muy común en todos los pequeños puertos pesqueros que se enclavan en el occidente de Asturias.

El concejo de los castros: Coaña y Mohías

No hay elemento que más se asocie al concejo de Coaña que la foto de su famoso castro. Se le conoce desde siempre como el Castelón de Villacondide. Lo que se ve a simple vista es la estructura urbana de un poblado fortificado totalmente romanizado del Siglo I A. d C. pero que tiene su origen como mínimo en la Edad del Hierro. Se conservan 84 construcciones visibles, dos saunas, fosos y estructuras de distinto orden y función. Si algo queda claro de este espectacular castro asturiano es que sigue escondiendo más secretos que certezas y eso es precisamente en lo que siguen trabajando los arqueólogos e historiadores.

Mohías, el castro de la rasa

Y luego está Mohías, un castro que se emplaza en plena rasa costera que se protege en una sucesión de fosos, casi a modo de diana, que termina en la explanada protegida por tanto corte artificial que apoya las defensas naturales de los arroyos y cortes que le bordean por su cara más meridional.

Coaña, sus castros y su famosa estela discoidea, también vinculada a los poblados fortificados, bien merecen una visita turística, fotográfica y sobre todo, didáctica.